jueves, 7 de julio de 2011

Te voy a extrañar, Miss.

Dicen que las cosas pasan por algo, yo digo que todos me la pelan.

Muchos decían que iba a ser una gran ingeniera, muchos decian que no servia para nada, muchos decían que a los 15 años iba a tener un hijo o que cuando me fui de mi casa me fugué con mi novio. A ninguna le atinaron.
Nadie había apostado a que dejaría la carrera, la hija de él Químico iba a terminar su carrera y encontrar un trabajo increíble. Pero es que nadie, nunca, apostó por mi felicidad. Nunca escuché decir a alguien "Vania va a ser feliz".

Y eso fue lo primero que logré.

Después de seis semestres le dije adiós a la ingeniería, dandome cuenta que para nada era lo mío.

Dicen que todo pasa por algo, quizá tengan razón.

Y es que ese día fui a ver a mi tía a su trabajo y le dije que en el momento en el que encontrara trabajo en Cuernavaca, me regresaba y dejaba atrás a Veracruz, la ciudad del horrendo calor.

Su comadre, directora de la escuela, necesitaba una profesora de inglés y ahí entro yo. Fui a verla, me entrevistó y me aceptó. Jamás había dado clases, incluso era mala malísima pésima exponiendo, o sea tartamudeo cuando me pongo nerviosa. Me dió pánico, miedo, terror y a la vez, me emocioné tanto.

"Mira, ella es la nueva miss de inglés, se llama Miss Ximena"

La directora le dijo a Ángel, que todo tímido me dijo hola y se fue corriendo de la dirección.

Recuerdo cada uno de los días que pasé con mis sotacos. No, la verdad no, tengo pésima memoria, pero cada vez que recuerdo algo mi mente se llena de alegría y ternura.

La primera clase, miedo, el primer trabajo que les dejé, el primer juego que hicimos, el primer homework que les dejé en su cuaderno, la primera vez que me dijeron Good bye, Miss... No lo puedo olvidar.

El primer dibujo del que me enamoré.
Ángel y su mapa del tesoro.


El primer evento que llevé yo solita, qué osote con mi tartamudeada. :(

"¿Usted es la miss de inglés?"
"Sí"


El primer regalito que me dieron.




La pastorela del amor.




Cuando me dieron mi bata.




Los trabajos.




Las desveladas preparando material.




Las fiestas.




Los cursos.




Las actividades.






Es que cada uno de esos momentos :'(

Una vez escuché decir "es que o sea, solo cuidan niños, se la pasan jugando con ellos y cantando canciones". Imbéciles cada uno de los que piensen eso. Es un verdadero compromiso, una responsabilidad, estár enfrente del grupo, hacer las cosas bien porque eres en ese momento, su ejemplo, cuidar que no se guamacee, enseñarles lo necesario y un poco más, aprender con ellos y aprender de ellos.

Los niños son la cosa más bonita del mundo, lo más tierno e inocente, con una gran capacidad. Ellos que cuando te sientes de la vil patadota llegan y te dicen "Te ves bien bonita, Miss" y hacen que se te olvide todo lo que un idiota te hizo o las deudas o que tu mamá te dijo que te odia o de la inflación. Esa mirada de "Miss, te extrañé mucho". Esas palabras de "Miss, no te vayas a tu casa, quédate otro ratito".

Las pláticas de Julieta, los chistes de Enrique, los gritos de Sebastián, los corazones que le salen bien bonitos a Bere, Aranza y su sonrisa, Jos y sus ojos hermosos, Ángel y el ángel que se carga que lo hace adorable, Alexis diciendo que ya se va a portar bien, Leslie y su timidez, Nicolás y su varicela, Mateo y su "No miss, yo no hice nada", Fernanda y su inteligencia.

Llegué a esa escuela en blanco, siendo una pollita, sin saber qué diablos iba a hacer y salí orgullosa de haber tomado la mejor decisión: dejar la ingeniería.
Ese momento en el que llegué por primera vez y dije enfrente de un grupo "Good morning" se quedará grabado bien bonito en mi corazón. Y es que encontré mi vocación, encontré lo que me gusta hacer, ese trabajo que me hace tan maravillosa la vida, aunque me hayan escupido, pegado, gritado, aunque a veces los papás sean difíciles, aunque no sepas que actividad harás mañana, aunque a veces ya no sepas como hacer que guarden silencio, aunque mueras de sueño, aunque estés llorando por dentro, aunque sientas que ya nada importa, siempre están ellos diciendote "Te quiero Miss".

No puedo evitar llorar, no puedo evitar extrañarlos, no puedo evitar querer regresar el tiempo y hacer esto de nuevo. Los extraño tanto. :'(
Mis mocosos, mis sotacos que ya crecieron. Ellos que ví como maduraron, como fueron avanzando, como aprendieron a leer inglés. Todos esos ratos que no cambiaría por nada del mundo, ni por todos los tacos de la vida.


Good bye, kids. :(

6 comentarios:

  1. Que bonito post vani.
    Y es neta, cuidar niños es otro pedo, como ya te conte hace mucho en la iglesia mormona habeces tenia que cuidar a los peques, contarles historias, cuidar que no se me pierdan, se peguen o se maten entre ellos no es tarea facil y pide mucha, MUCHA paciencia.

    Pero en algo te equivocaste.
    un dia mientras saliamos del tecno y tu llorabas te dige: -ya no llores vania, vas a ver que un dia seras muy feliz.
    y quien hiba a imaginar que siendo miss de maestra de kinder lograrias eso.
    ojala y que siempre tengas esos bonitos recuerdos de tus niños.
    cuidate niña bicho.
    se te extraña.

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  2. Pues qué suerte tienes de haber pasado todo un año con tantas experiencias y tanta felicidad. ¿Te acuerdas que al principio nomás eras una sustituta? Mira nada más hasta dónde has llegado. Sé que no importa mucho, pero me siento orgullosa por tí, por lo que aguantaste este año y por que supiste vivirlo como se debe.

    Ahora por favor, no lo eches en saco roto. Todos tenemos derecho a regarla de vez en cuando, pero hay un límite. Éste es un gran paso para tí, sigue por ahí si eso te hace feliz y que no te importe nada ni nadie. Ya no repitas errores, mejor encuentra nuevas formas de caer (y de levantarte, desde luego!)

    Tú y yo estamos comenzando cada quien una nueva etapa y quién sabe qué vendrá, pero sabes que pase lo que pase siempre tendrás mi apoyo para lo que quieras. Muchas felicidades por este año. Mil abrazos y besos

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  3. Recién te leo, y tus forma de escribir es tan fresca que pone buenas :) pero es esta entrada en particular con la que me identifico, pues estoy por graduarme de maestra de inglés y sé lo satisfactorio de la profesión a pesar de sus contras. Felicitaciones por salir de aquello que no te haría feliz el resto de tu vida.

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  4. Ay, qué encantador de tu parte.
    Y qué padre que seas maestra de inglés. Es tan bonito, los beibis, hacen cada día el mejor día con sus sonrisas.
    Saludos!

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